LAS INFRAESTRUCTURAS CICLISTAS, UNA ASIGNATURA PENDIENTE

Artículo de opinión publicado en Diario de Navarra. Jueves 17 de septiembre de 2015

En el año 2004, una encuesta municipal del Ayuntamiento de Pamplona, realizada por la empresa Consultrans, puso de manifiesto que el 36% de los ciudadanos encuestados se sentían ciclistas potenciales dispuestos a utilizar la bicicleta siempre y cuando hubiese carriles bici (Diario de Navarra, 8 de septiembre de 2004).

Así mismo, en una encuesta que realizó el CIES durante la campaña electoral de las recientes elecciones municipales al Ayuntamiento de Pamplona, quedó patente que la carencia de carriles bici en muchos barrios era el principal problema de la ciudad (Diario de Navarra, 16 de mayo de 2015).

Ante esta situación de demanda ciudadana, la Asociación Medios de Transporte Saludables (AMTS), cuyos fines son la promoción del uso de la bicicleta como medio de transporte, la defensa de los intereses ciclistas y la colaboración con los entes públicos que defiendan dichos fines, elaboró un documento donde se recogen  una serie de propuestas para paliar los serios problemas que afectan a los ciclistas de nuestra ciudad y que puede ser consultado en la página web de la Asociación (www.asociacionmts.org). El documento fue entregado a los representantes de todos los grupos políticos que concurrieron a las pasadas elecciones municipales.

En este sentido, la respuesta de los distintos grupos se tradujo en el compromiso de efectuar los cambios necesarios para que los ciclistas dejen de circular por las aceras, a través de la implementación de nuevos carriles bici en las vías principales de la ciudad, reconvirtiendo el carril coche anexo a la mediana en carril bici bidireccional, logrando así un reparto más justo y equitativo de la vía pública, en arterias como Pío XII, Avenida de Bayona, etc.

Para hacernos una pequeña idea de la magnitud del problema, en este preciso momento, mientras usted está leyendo este artículo, la mayoría de los ciclistas, más del 60%, estará circulando por las aceras de nuestros barrios, conocedores, en mayor o menor medida, de que está prohibido por las molestias que ocasionan a los peatones, pero, a la vez, conscientes de que el ciclista, ante la falta de infraestructuras ciclistas y de un adecuado y riguroso calmado de tráfico, necesita sentirse seguro y protegido frente al resto de los vehículos a motor. No conviene olvidar que el perfil del ciclista urbano es muy variado, desde los muy jóvenes hasta los de edad avanzada, y no todos tienen las mismas condiciones físicas, destrezas ni experiencia.

Después de tantísimo tiempo de sequía política en materia ciclista, y a pesar de tener una nueva corporación, los ciclistas seguimos sintiéndonos huérfanos, ignorados y, por tanto, discriminados.

Teniendo en cuenta que la bicicleta es uno de los referentes de la movilidad sostenible y que es parte de la solución a los problemas de tráfico, medio ambiente, salud y economía, debería aparecer de manera prioritaria e inmediata en la agenda de los responsables del Ayuntamiento como un imperativo moral, cultural y político.

Creemos que ya ha pasado el tiempo de las promesas y que es la hora de actuar con voluntad, con compromiso y con hechos, y de que la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Pamplona (una de las áreas que gestiona las infraestructuras ciclistas) establezca cauces de comunicación y entendimiento con los colectivos ciclistas, tal y como lo hacen en aquellas ciudades que apuestan verdaderamente por la bicicleta, como San Sebastián.

Jesús Sukuntza
Ciclista Urbano y miembro del Observatorio de la Bicicleta de Pamplona